Después de abrirse paso bajo la lluvia, Harry, Ron y Hermione llegan al fin al vestíbulo del castillo, pero incluso así no están a salvo de mojarse, pues Peeves está al acecho para lanzar globos de agua a quienes entren. Normalmente no me caen muy bien las bromas de Peeves, pero esta en particular me pareció bastante divertida, la verdad.
Una vez instalados en la mesa de Gryffindor somos testigos de la primera Ceremonia de Selección desde un punto de vista externo, pues Harry se perdió las dos anteriores. Está claro que para un alumno veterano la Selección no es tan importante a menos que se conozca a alguno de los novatos (como sucede aquí con Dennis) y en general tienen todos más ganas de que se acabe para poder comer.
Sin embargo, el banquete no es todo alegría, pues Hermione monta en cólera al saber que Hogwarts tiene en empleo a muchos elfos domésticos y se niega a participar en lo que ella considera esclavitud. No voy a repetirme, ya habrá tiempo para discutir sobre la campaña pro derechos de los elfos domésticos de Hermione. Tampoco voy a hablar de "Moody", que hace su aparición en persona como el nuevo profesor de Defensa contra las Artes Oscuras, pues los siguientes capítulos están dedicados a él. Lo suyo es hablar del Torneo de los Tres Magos, el secreto que iba a ser revelado.
Por la reacción de Fred, el Torneo es de conocimiento general en el mundo mágico, aunque por lo visto hace tanto que no se celebra que los detalles se han perdido (hay que achacar esto a que Rowling pretende introducir los conceptos cuando sean relevantes para la trama). De momento sabemos que va a ser en Hogwarts, que participan candidatos de Beauxbatons y Durmstrang que llegarán a la escuela a finales de octubre, y que sólo se permitirá participar a los alumnos mayores de edad, una norma nueva para esta edición.
Esta última norma no sienta bien para muchos alumnos, que esperaban presentarse; Fred y George, que ya están en sexto pero no cumplirán diecisiete a tiempo, están especialmente furiosos. Creo que más que basarse en edad deberían hacerlo por cursos y dejar que se presentaran los alumnos de sexto y séptimo, pero Dumbledore sabrá. Además en otros colegios tendrán otro sistema, puede que sea para igualarlo.
Y así queda la cosa; de momento parece que nuestros protagonistas no van a estar directamente involucrados en el torneo, y de todas formas hasta octubre no va a empezar nada, así que tienen que concentrarse en el nuevo curso que les espera. Ya cambiarán las cosas...
Esta semana empezamos agosto, y con él una nueva traducción de Pottermore. Esta vez será sobre el Sombrero Seleccionador. ¡No os la perdáis!
Observaciones y curiosidades:
- En la traducción, Harry piensa en Malcolm Baddock como Malcolm antes de ser seleccionado para Slytherin y como Baddock después. En el original siempre piensa en él como Malcolm.
- Natalie McDonald, la chica seleccionada para Gryffindor en este capítulo, tiene una agridulce historia detrás. Natalie era una niña enferma de leucemia a la que le quedaba poco de vida mientras se escribía El cáliz de fuego. Su madre trató de contactar con Rowling, pero para cuando ella respondió, ya era tarde. La autora y la madre de Natalie hicieron amistad, y Rowling incluyó a este personaje como un pequeño homenaje a la niña.
- En el original, Nick no dice que Peeves enfadó a los elfos domésticos, sino que les estaba asustando.
- En el original, Dumbledore dice que está seguro de que muchos ansían darle a Hogwarts el honor de tener la Copa de los Tres Magos, mientras que en el original dice que está seguro de que muchos buscan ganarla para sí.
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