¿Qué es esto?

Soy un fan español de Harry Potter que quiere hacer un análisis completo de toda la saga del chico de la cicatriz, intentando destacar temas recurrentes, elementos que reaparecerán más adelante o que han aparecido después y cambios producidos en la traducción española de la saga (que no son pocos), además de curiosidades varias, para así algún día llegar a una perspectiva total de todo el universo Potter.

Cada lunes o martes habrá un post nuevo de cada capítulo de la saga analizándolo al detalle, y cuando acabe uno de los libros se hará un análisis de la película correspondiente, también habrá reseñas de la saga de Animales Fantásticos cuando vayan saliendo, así como del libro de El Legado Maldito al terminar la saga.

Asimismo, la primera semana de cada mes postearé una traducción personal de alguno de los textos que Rowling publicó en Pottermore y que ahora han quedado tristemente inaccesibles para los fans que no sepan inglés con la nueva versión. además de algunas aclaraciones sobre juegos de palabras, localizaciones, etc., y curiosidades que a lo mejor no sabíais.

Huelga decir que habrá spoilers a mansalva; si queda alguien en este planeta que no sepa las sorpresas típicos de la serie y no quiera saberlas que no se meta aquí. Queda avisado.

Cualquier comentario o sugerencia es bienvenido; ¡dejad vuestras impresiones tras leer!

lunes, 29 de octubre de 2018

Capítulo 10: El relato de Kreacher

En el capítulo 10 de Harry Potter y las Reliquias de la Muerte, Harry se topa sin pretenderlo con una pista importante, y empiezan a tirar del hilo para encontrar el guardapelo perdido.

Al día siguiente, Harry se despierta primero y valora la situación en la que está de forma realista: se enfrenta a una búsqueda complicada, sin pistas reales que seguir y con dos amigos que, aunque son la mejor compañía que podría desear, están empezando a descubrir sus verdaderos sentimientos hacia el otro; Harry les conoce y sabe lo que pasa mejor que ellos mismos, así que empieza a sentirse un poco solo.

A veces es mejor no cavilar demasiado en estas situaciones, y eso es lo que parece que Harry tiene en mente cuando decide dar un paseo por la casa. Mientras camina llega a la habitación de Sirius, y en su interior se encuentra todo un viaje al pasado. La foto del antiguo grupo es muy emotiva, pero la carta de Lily lo es mucho más, y es por lo normal que es.

Aunque da mucha información, realmente te crees que es una carta que Lily le mandó a Sirius después del primer cumpleaños de su pequeño, hablando de anécdotas, visitas y cosas mundanas, y eso es lo que la hace tan fuerte en su valor emocional. Harry lo piensa y se la guarda, y no es el único en darle ese valor a la carta.

Cuando Hermione aparece, los dos revisan la información obtenida de la carta, pero lo más importante lo encuentran en el antiguo ocupante de la habitación de al lado: Regulus Arcturus Black. RAB.

Voy a hacer un breve inciso para hablar de las teorías sobre RAB. Para cuando el último libro se puso a la venta, los rumores y teorías habían llegado hasta el punto de que se daba por hecho que Regulus era la misteriosa persona, y que el guardapelo era el que apareció durante la limpieza en Grimmauld Place, tal como comenté en su momento. Tengo un buen recuerdo de discutir con mis amigos si Kreacher habría conseguido robar el guardapelo o si tendríamos que ver a Harry rebuscando en un vertedero mágico o algo por el estilo. Sigo pensando que habría sido curioso ver esto último.

Así pues, cuando la teoría pareció confirmarse, muchos sonreímos con complicidad y nos felicitamos por haber podido predecir el camino mental que Rowling había trazado. Contemplamos con aires casi de superioridad cómo Hermione recordaba aquel guardapelo que vieron en la limpieza, cómo Harry dedujo que Kreacher lo habría robado, y hasta que averiguaran que Mundungus se hizo con él durante su pillaje tras la muerte de Sirius. Las pistas estaban ahí, y fuimos capaces de verlas. Lo que ninguno esperábamos es lo que vino después.

La historia de Kreacher es devastadora y planta a Regulus como una buena persona en el fondo, que está lejos de ser el cobarde sin cerebro que su hermano parecía pensar que era, y revela una faceta del elfo que le aleja del traidor sin lealtad que parecía antes: Kreacher, como los otros elfos domésticos, tiene su propia moralidad, y ofrecerá más fácilmente su lealtad hacia aquellos que parezcan mostrar lealtad hacia él.

Bravo por Hermione, que ya ha entendido que no puede forzar a los elfos a adoptar una perspectiva humana para lograr sus necesidades, sino que debe ayudarles a pedir lo que necesiten en sus propios términos. Cuando se lo hace ver a Harry, este empieza a compadecerse de Kreacher, y le entrega el otro guardapelo como símbolo de su nueva comprensión, recibiendo inmediatamente una respuesta muy positiva del elfo. Las cosas parece que van bien.

Ahora, a esperar a ver qué nos cuenta Mundungus.

Observaciones y curiosidades:
  • Lo que falta de la carta se lo llevó Snape porque contenía la firma de Lily y sus abrazos. Aparte de eso contaba que Dumbledore fue amigo de Grindelwald. También se llevó la parte de la foto en la que salía Lily.
  • Dumbledore tenía la capa invisible de James porque al verla la reconoció como una de las Reliquias de la Muerte, y le pidió poder examinarla.
  • Gus viene de Colagusano, claro; en el original es Wormy, de Wormtail.

lunes, 22 de octubre de 2018

Capítulo 9: Un sitio donde esconderse

En el capítulo 9 de Harry Potter y las Reliquias de la Muerte, Harry, Ron y Hermione tienen que hacer su salida antes de tiempo; lo malo es que no saben a dónde ir.

El Ministerio ha caído. La última esperanza de poder llevar una vida relativamente normal mientras se combate a Voldemort se ha ido al garete, y ahora los mortífagos lo controlan todo. Nadie está seguro, y el enemigo puede llegar a la boda en cualquier momento.

Los invitados huyen uno tras otro, y los miembros de la Orden tratan de proteger a sus familias y a los que se hayan quedado. Por supuesto Harry, Ron y Hermione no pueden unirse a ellos, los mortífagos no pueden ver a Harry allí, así que en cuanto se reúnen se desaparecen, acabando en el mundo muggle.

No puedo menos que felicitar a Hermione por su previsión; ha preparado un medio para poder llevar todo lo que necesiten y tenerlo preparado en cualquier momento, y hasta metió en su bolso la mochila de Harry por si pasaba lo que pasó. Un aplauso para ella, por favor.

Sin embargo, una vez a salvo no saben qué hacer, y se asientan en una cafetería nocturna para pensarlo. El problema es que no tienen ni idea de lo que ha pasado después de que se fueran, y no pueden averiguarlo porque delatarían su posición y pondrían en más problemas a los demás. Sus pensamientos quedan interrumpidos cuando les atacan dos mortífagos.

Aunque consiguen despacharlos más o menos fácilmente, la paranoia es evidente; ¿cómo les han encontrado tan rápido? Sea cual sea la respuesta, nuestros héroes tienen que proseguir con la perspectiva de que, de alguna manera, los mortífagos pueden encontrarles allá donde vayan. Es muy aterrador, y realmente parece que se han apoderado de todo.

Harry toma el control: mientras sus amigos entran en pánico, él les dirige para quitarse de encima a los mortifagos y dejarlo todo como estaba antes de marcharse para no llamar la atención de los muggles. También tiene la idea de ir a Grimmauld Place; aunque Snape puede entrar, es el único mortífago que puede, y si les pueden localizar en cualquier lugar, mejor uno en el que sepan con quién pueden encontrarse. Es una idea sólida.

Una vez allí tienen que enfrentarse a las nuevas medidas de seguridad, que dan muy mal rollo. Pasamos a otra cosa. Afortunadamente, Arthur es capaz de enviarles un mensaje para comunicarles que están a salvo, pero vigilados, y que no deben contactar. Es un gran alivio, y especialmente Ron se calma mucho después del mensaje.

Pero Harry no está tranquilo, porque la ira de Voldemort se vuelve a colar en su cabeza y tiene que ver cómo obliga a Draco a torturar a los mortífagos que les han dejado escapar. Draco no me merece demasiada lástima, pero está claro que Harry sí tiene empatía por su antiguo abusón. De todas formas, sin duda la pregunta que él, Ron y Hermione tienen en mente es la misma:

¿Y ahora qué?

Observaciones y curiosidades:
  • Los mortífagos localizaron a los chicos porque Hermione pronunció el nombre de Voldemort al decirle a Ron que todo lo que necesitan saber es que se ha apoderado del Ministerio. Los mortífagos disfrazados entran justo después, gracias al conjuro que ha puesto sobre su nombre.
  • En el original, Hermione dice que sacó sus ahorros de dinero muggle del Building Society, un conglomerado de empresas británicas que funcionan como bancos. 
  • Hermione dice que nunca ha modificado los recuerdos antes, pero lo hizo con sus padres. Puede que usara otro conjuro, o que no quisiera reconocer en alto lo que hizo. También puede ser un error de Rowling.

lunes, 8 de octubre de 2018

Capítulo 8: La boda

En el capítulo 8 de Harry Potter y las Reliquias de la Muerte, la boda de Bill y Fleur tiene lugar al fin, y en la ceremonia Harry se topa con grandes revelaciones.

Ir a una boda es muchas veces raro, sobre todo si no eres familiar de alguno de los dos novios. Incluso si lo eres, te ves rodeado de gente a que que no conoces, te encuentras de nuevo con gente a la que hace mucho que no veías y conoces en persona a gente de la que sólo habías oído hablar antes.

A Harry le pasa todo esto, y como está disfrazado de un inventado primo Barny Weasley, incluso aquellos que ya le conocen le toman por alguien desconocido (menos Luna. Bendita sea). Esto le lleva a conocer ciertas facetas de personajes nuevos y antiguos:

Para empezar tenemos a Xenophilius Lovegood, el padre de Luna. Ya habíamos oído hablar de él y sabíamos que era muy similar a su hija, y ahora podemos comprobarlo. Aunque son muy parecidos, Xenophilius tiene un aire de experiencia y seguridad en lo que dice que le distingue de las elucubraciones de Luna, que son más imaginativas. Sigue siendo toda una compañía.

El siguiente es Krum, que ha vuelto con un mayor dominio del inglés y más dispuesto a hablar que en su última aparición. Krum parece contento de ver a Hermione de nuevo (y viceversa), pero Ron ha aprendido la lección y se la lleva a bailar enseguida, para contento de la chica. Ron está teniendo una buena racha por el momento.

A Krum le molesta pero se lo toma con deportividad, más interesado en el símbolo que lleva Xenophilius al cuello. El señor Lovegood tiene todo el derecho a llevarlo, él lo hace por su sentido original, pero Krum sin duda se siente herido por lo que se hizo en nombre de aquel símbolo, algo que hay que entender. ¿Que un símbolo se convierta en marca de actos terribles anula todo lo que representaba antes de aquello? Es una discusión interesante, y me hubiera gustado saber cómo se defendió Xeno cuando Krum le abordó.

Harry se acuerda durante la conversación de quién es Gregorovitch, lo que le lleva a preguntarse cuáles son las intenciones de Voldemort con él. Dado lo que sucedió en su anterior encuentro imagina que el villano busca una nueva varita con la que poder superar a la suya, ahora que ha visto que no le vale con cualquiera. No anda desencaminado.

Mientras pasea por el convite Harry se topa con otro personaje del que hemos oído hablar pero al que no habíamos visto, Elphias Doge. Animado por la esquela que escribió de Dumbledore, Harry se decide a hablar con él y le revela su identidad, y los dos empiezan a charlar sobre el amigo común. Es una buena charla hasta que interviene Muriel, la tía abuela de Ron, que resulta ser la versión mágica de la tía Marge.

Muriel está llena de prejuicios e intolerancia, y claramente siente placer a la hora de atacar a Dumbledore delante de Elphias. El pobre hombre está aún demasiado afectado como para defender a su amigo de las acusaciones como es debido, y le escandaliza que Muriel se atreva siquiera a afirmar lo que afirma.

Harry termina en medio de los dos, y el pobre chico no sabe qué creer. Lo normal sería creer al amigo de Dumbledore, al hombre que le acompañó durante tantos años, pero puede ver que Doge no quiere saber nada de cualquier cosa que pinte a su gran amigo de manera negativa, sea cierta o no, y ante las acusaciones de Muriel sólo se lamenta y responde con pobres excusas. Si el que acusa con saña parece más razonable, algo va muy mal.

Pero Harry no tiene tiempo para rumiar todo esto, porque Voldemort ha logrado su objetivo y ha derrocado al Ministerio. Todo se ha ido al traste.

Observaciones y curiosidades:
  • En el original, Krum no dice que retaría a Xenophilius si Fleur no le hubiera invitado (a Krum), sino que lo haría de no ser porque también es un invitado de Fleur como él. 
  • Por supuesto, el símbolo que lleva Xenophilius es el de las Reliquias de la Muerte, que fue apropiado por Grindelwald y lo usó como propio, de ahí que se produzca este problema.

lunes, 1 de octubre de 2018

Capítulo 7: El testamento de Albus Dumbledore

En el séptimo capítulo de Harry Potter y las Reliquias de la Muerte, Harry celebra su mayoría de edad junto a sus amigos, pero recibe una visita inesperada.

Llegamos al fin al 31 de julio, el cumpleaños de Harry. Para variar, esta vez puede celebrarlo con sus amigos y seres queridos en lugar de conformarse con recibir sus regalos mientras está solo en Privet Drive. Es una pena que la situación esté tan mal, porque se nota que Harry agradece este cambio.

Después de celebrar su capacidad de usar la magia fuera de la escuela y charlar con Ron, los dos chicos bajan a desayunar y Harry puede abrir sus regalos delante de todos, y comentarlos. Por supuesto, el abrazo a Molly es lo mejor de todo: se nota que Harry le agradece todo lo que ha hecho por él; no hay más que comparar con la despedida a los Dursley. Me emociono siempre con esta escena.

La parte con Ginny es también muy emotiva de otra forma bien distinta: Ginny ha estado rumiando las razones de Harry para poner fin a su relación, y su motivación para besarle ahora puede ser una de muchas: ¿Quiere retenerle y que no se vaya? ¿Quiere poner a prueba su resolución? ¿Quiere un último recuerdo con él antes de lo inevitable? Hagan sus apuestas.

Las acciones de Ron también son muy curiosas; lejos de interrumpir el beso sin darse cuenta, parece estar haciéndolo a propósito, zafándose de Hermione para hacerlo. Ron ha visto cómo ha estado Ginny desde que cortó con Harry, y no quiere que reciba esperanzas vanas; tal vez hizo bien en interrumpirles.

Por la noche, Harry tiene su fiesta de cumpleaños oficial; Hagrid es jovial, recordando los viejos tiempos, pero Lupin está cada vez más taciturno. No es precisamente el alma de la fiesta, al contrario que Tonks. Todo, lo bueno y lo malo, queda parado con la aparición del ministro.

No voy a entrar a valorar ahora los objetos que Dumbledore lega a nuestro trío, porque irán cobrando importancia a lo largo del libro. Sólo quiero destacar que nombrarlos a los tres en su testamento de forma abierta subraya la importancia que tienen para el director, y su confianza en que conseguirán los objetivos que les ha pedido, además de saber que cada objeto es lo que van a necesitar cada uno. Estoy seguro de que ellos se dan cuenta.

Por otra parte, el ministro está en sus horas bajas; sus acciones contra Voldemort no están dando resultado y la presión pública se recrudece, con lo que tiene que tapar más fracasos para evitar quedar peor y que la población mágica entre en (más) pánico. Con Dumbledore muerto, cualquier plan que tuviera para obtener la victoria parece haberse evaporado, así que ha estado investigando los objetos que ha dejado en su testamento para intentar encontrar algo que le ayude.

Obviamente, no es la mejor idea. Lo que tendría que hacer es ser honesto con la realidad de la situación y colaborar con la Orden de igual a igual, tratando de deshacerse de los prejuicios que le están impidiendo tomar las decisiones correctas. Pero eso sería mucho pedir; cuando tres chicos de diecisiete años son capaces de echarle en cara todo lo que está haciendo mal, el ministro entra en cólera, y es sólo por suerte que no llegan a algo más.

Hay que decir que Scrimgeour hace un intento de ser conciliador, pero Harry le recuerda el primero y más grave de sus errores: que nunca han mostrado arrepentimiento por sus acciones del pasado, acciones que Harry tiene grabadas a fuego. Mientras eso siga así, el Ministerio nunca será un aliado real, sino un obstáculo más en el camino a la verdad.

Observaciones y curiosidades:
  • Gregorovitch es un fabricante europeo de varitas, a quien Voldemort busca para localizar la Varita de Sáuco. Harry conoce su nombre de la inspección de varitas realizada por Ollivander en El Cáliz de Fuego, concretamente la de Krum, fabricada por Gregorovitch. Harry se acordará de este evento en el siguiente capítulo.
  • En el original, Gorgovitch, el jugador de los Chudley Cannons, no tiene el récord de anotaciones, sino de mayor número de veces que se le cayó la quaffle, más acorde con las pocas ganas de Ron de acordarse de él. 
  • El moke es un lagarto mágico con la capacidad de encogerse a voluntad cuando aprecia el peligro, y es muy buscado para hacer carteras y objetos parecidos con su piel porque también se encogen cuando se acercan desconocidos. 
  • El último cuento de Beedle que Ron menciona está mal traducido; debería ser Babbity Rabbity y su cepa carcajeante, no cacareante.
  • La insistencia de Molly en cortarle el pelo a Charlie es de lo más extraña, pues es con Bill con quien siempre ha tenido problemas respecto a su peinado. Es posible que Rowling se confundiera con esto, porque la escena entra en juego como la culminación de una broma recurrente.