Encontramos a Harry y a los otros en la clase de Pociones, justo cuando Malfoy vuelve de su estancia en la enfermería. Como era de esperar, está sacando partido de su herida (que seguro que se ha debido curar ya por más que asegure lo contrario) para que echen a Hagrid y de paso librarse de ciertas tareas, y si es a costa de Harry y Ron aún mejor. Es asqueroso.
Sin embargo, entre tanto abuso de Malfoy hay algo de misterioso, pues parece saber algo sobre Sirius Black que Harry y Ron no, y desde luego disfruta restregándoselo sin tener intención de contarlo. Mirando atrás resulta extraño; lo que sepa tiene que venir de su padre, pero por lo que dice parece creer que Sirius es un mortífago, cuando Lucius debería saber que no lo es. Es raro. En la primera guerra la mayoría de los mortífagos no se conocían entre ellos, pero Lucius estaba en el círculo más cercano a Voldemort, así que debería conocer todo el asunto de Colagusano.
En todo caso, Malfoy pronto queda eclipsado en animosidad por Snape, que en este capítulo alcanza cotas de desprecio nunca vistas. Después de fastidiar a Harry y Ron en favor de Draco se dispone a acosar a Neville por fallar en el ejercicio (cualquiera diría que cree que de alguna forma su acoso va a conseguir que mejore), insulta a Hermione cuando interviene, amenaza con envenenar al sapo de Neville delante de toda la clase para enseñarle una lección (¿¿??), y cuando Hermione consigue ayudarle a restaurar su poción Snape les quita puntos para Gryffindor. El profesor del año, vamos. Por no hablar de cuando insulta a Neville delante de otro profesor.
Por suerte, después de la no muy magistral lección de Snape tenemos la primera clase de Defensa contra las Artes Oscuras impartida por Lupin, que resulta sí ser un buen profesor. El contraste es estupendo, y está claro que Rowling lo ha escrito a propósito: mientras que Snape acosa a Neville porque no se ajusta a su estándar, Lupin intenta que se relaje para que dé lo mejor de sí, gracias a ello consigue resultados. Mientras que Snape insulta a Hermione por intentar demostrar lo que sabe, Lupin lo permite pero también procura que los demás tengan su momento para subir su autoestima. Por no hablar de aprovechar un poco la situación en burla de Snape, algo que necesitaba todo el mundo, sobre todo Neville, aunque no sea algo muy respetuoso.
La experiencia con el boggart sirve de metáfora para lo que vendrá después, el cómo se puede derrotar al miedo y a la desesperación mediante la alegría y la esperanza. Después de todo lo que ha sucedido, y con la amenaza presente de Sirius Black y los dementores, es un momento perfecto para luchar contra tus miedos y saber que puedes superarlos si sabes cómo hacerlo y estás dispuesto.
Por supuesto, sigue habiendo cosas extrañas, como por qué Lupin no ha permitido que Harry se enfrentara al boggart, y la misteriosa esfera en la que la criatura se convirtió cuando el profesor atrajo su atención. Pero por ahora quedémonos con esto, con la buena sensación de que se puede ganar a la oscuridad. Eso es lo importante. ¡Nos vemos!
Observaciones y curiosidades:
- Cuando Snape increpa a Neville por el fracaso de su poción, en el original no le grita como en la traducción; al fin y al cabo, él no es de gritar, es más mordaz que eso.
- Evidentemente, lo que Hermione lleva dentro de la túnica cuando desaparece un momento es su giratiempo, que acababa de usar; en el original se dice que lo está ocultando dentro en vez de llevarlo ya metido y sujeto como en la traducción.
- El conjuro waddiwasi viene de la palabra sueca vadd, que significa "relleno", y vassi, que significa "adelante" en francés. Es decir, que el conjuro viene a significar "adelante con el relleno" o, más abstractamente, "lanzamiento de relleno".
- Riddíkulo, o riddikulus, como se dice en el original inglés, viene del latín ridiculum, que significa broma. Como curiosidad, decir que la palabra latina se pronuncia con el acento en la penúltima sílaba, acentuación que se mantiene en la versión inglesa del conjuro, pero no en la nuestra.
- En la traducción se corta una frase mientras se preparan para enfrentarse al boggart. En ella Harry se pregunta a sí mismo cómo hacer que un dementor sea menos aterrador, pero no se le ocurre nada.
- En el original, el boggart Snape no intenta coger a Neville por la túnica, sino que trata de sacar algo de la suya, probablemente su varita (aunque a saber si un boggart puede imitar hechizos).
- Tanto el boggart como la banshee provienen del folclore británico. En concreto, la banshee es originaria del folclore de Irlanda, de donde es Seamus.
P.D. Tengo que decir que me ha costado decir lo que he dicho de Snape teniendo en cuenta la triste muerte de su actor en las películas, Alan Rickman, pero eso no significa que vaya a modificar mi reseña, pues los actos de Snape en este capítulo son inexcusables y no quiero blanquearlos. De todas formas, la versión cinematográfica de Snape es diferente de la literaria, no hay que confundir eso.
Completamente de acuerdo con lo que dices de Snape. Es increíble lo injusto que podía llegar a ser, y además favoreciendo a Malfoy. A mi tampoco me gusta nada Severus, por muy buenas intenciones que tuviera, y por mucho que estuviera haciendo un papel, jamás le hubiera puesto a mi hijo el nombre del profesor que me hizo la vida imposible
ResponderEliminarY por cierto, estaría haciendo un papel, pero todos los puntos que le quito a Gryffindor eran más que reales
ResponderEliminar