¿Qué es esto?

Soy un fan español de Harry Potter que quiere hacer un análisis completo de toda la saga del chico de la cicatriz, intentando destacar temas recurrentes, elementos que reaparecerán más adelante o que han aparecido después y cambios producidos en la traducción española de la saga (que no son pocos), además de curiosidades varias, para así algún día llegar a una perspectiva total de todo el universo Potter.

Cada lunes o martes habrá un post nuevo de cada capítulo de la saga analizándolo al detalle, y cuando acabe uno de los libros se hará un análisis de la película correspondiente, también habrá reseñas de la saga de Animales Fantásticos cuando vayan saliendo, así como del libro de El Legado Maldito al terminar la saga.

Asimismo, la primera semana de cada mes postearé una traducción personal de alguno de los textos que Rowling publicó en Pottermore y que ahora han quedado tristemente inaccesibles para los fans que no sepan inglés con la nueva versión. además de algunas aclaraciones sobre juegos de palabras, localizaciones, etc., y curiosidades que a lo mejor no sabíais.

Huelga decir que habrá spoilers a mansalva; si queda alguien en este planeta que no sepa las sorpresas típicos de la serie y no quiera saberlas que no se meta aquí. Queda avisado.

Cualquier comentario o sugerencia es bienvenido; ¡dejad vuestras impresiones tras leer!

lunes, 17 de junio de 2019

Capítulo 32: La Varita de Sáuco

En el capítulo 32 de Harry Potter y las Reliquias de la Muerte, Harry, Ron y Hermione se abren paso por la batalla para llegar hasta Nagini, y por el camino ven cosas terribles.

Fred ha muerto. Esa es una realidad devastadora y que deja claro que nadie está a salvo. Esta batalla no es un despliegue triunfante de las fuerzas del bien contra las fuerzas del mal, sino un terrible asedio en el que la muerte acecha en cada esquina, y la única forma de parar todo esto es que Voldemort caiga.

Todos lo saben; pero tanto Harry como Ron tienen la necesidad de unirse a la lucha, de hacer una contribución menos valiosa pero sí más tangible; matar a algún mortífago resultaría más satisfactorio en el momento que ir a por una serpiente, pero Hermione les recuerda que tienen una misión más importante, y son los únicos que pueden acometerla.

Así, el trío se abre paso por el castillo para llegar a la Casa de los Gritos, que es donde se oculta Voldemort; Ron se indigna de que no esté participando en la batalla, pero las cosas ya están yendo lo bastante mal para los defensores de Hogwarts sin que su enemigo más peligroso intervenga. La cuestión es si el villano teme encontrarse con Harry en la batalla sin tener la posesión total de la Varita de Sáuco, o hay algún otro motivo. Me parece una posibilidad intrigante.

Lo que ven a su alrededor en su camino es devastador. Hay algunas partes emocionantes, como McGonagall dirigiendo pupitres o Neville lanzando plantas mágicas, pero también vemos a Lavender ser víctima de Greyback y a Hagrid arrollado por una marabunta de acromántulas, que lo arrastran hasta el Bosque Prohibido. Harry se ve afectado por esto más que por ninguna otra cosa, y entonces aparecen los dementores.

Tengo que decir que lo que más me perturba en este capítulo es ver a Harry incapaz de invocar un patronus. El conjuro ha llegado a ser una de sus señas de identidad, casi una promesa de poder recordar los buenos momentos para superar cualquier adversidad. Que no pueda hacerlo ahora recalca lo horrible que está siendo todo. Afortunadamente, y sin saberlo, Harry ya había puesto las semillas para superar esta situación.

Sus amigos, que aprendieron de él en sus clases, usan el conjuro que les enseñó para salvarle, y Luna (bendita sea) le recuerda por qué está luchando. Nadie va a rendirse, y él tampoco lo hará. Con renovada determinación, el trío se dirige al sauce boxeador y entra en el pasadizo.

Sin ser vistos espían la conversación entre Voldemort y Snape, que ha sido llamado por su maestro. Los dos tienen una perspectiva muy interesante aquí. Snape se ha dado cuenta de que Nagini está bajo protección mágica, así que ha llegado el momento de impartir a Harry el conocimiento que necesitará para acabar con la batalla, algo que sin duda está tratando de que suceda, dada su insistencia de que se le permita ir a buscarle. ¿Qué esperaba decir cuando se encontraran? Harry no estaría muy contento de encontrarse con el profesor, y dudaría de todo lo que este le contara. En todo caso, Voldemort tiene sus propios planes.

El Señor Tenebroso tiene dudas. Estaba convencido de que poseer la Varita de Sáuco le permitiría superar cualquier posible obstáculo y vencer a Harry, pero ahora que ha perdido tantos horrocruxes y ha tenido la oportunidad de usarla ya no lo está tanto. Recordando la información de Ollivander deduce que Snape es el poseedor legítimo de la varita, y por tanto debe eliminarle para que caiga en su posesión. Es un cálculo frío que no hace sino subrayar la egolatría de Voldemort, que está dispuesto a sacrificar sin pensarlo dos veces a quien considera su mejor vasallo para ganar algo más de poder. Será su error. Otro más. Lo más que puede ofrecer es una vaga disculpa.

Snape está aterrado, pero no de morir, sino de hacerlo antes de cumplir su cometido. Afortunadamente para él, Harry estaba allí todo el tiempo, y el último acto del personaje más misterioso de la saga es entregarle a su odiado alumno sus recuerdos, su vida, aquello que antes no quería que viese pero que ahora debe ser conocido. Porque hay grandes verdades que tienen que revelarse.

No han conseguido llegar hasta Nagini, pero Harry ha encontrado algo mucho más valioso y peligroso: la verdad.

Observaciones y curiosidades:
  • Cabe preguntarse si basta con ordenar a tu mascota que mate al dueño de la varita para controlarla, pero al final da lo mismo. Desde luego, Voldemort estaba seguro de que sí.

2 comentarios:

  1. Nagini era Voldemort, su alma residía en ella. Era lo mismo si "la carne" de Nagini o la de Voldemort mataban a Snape, el alma era el mismo en ambos cuerpos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues supongo que se puede ver de esa manera, sí. En todo caso no es relevante porque Snape no era el propietario de la varita, pero supongo que Voldemort asumía algo por el estilo.

      Eliminar